domingo, 25 de septiembre de 2011

EPÍLOGO: Un caminar que no tiene fin

Desde el primer paseo que dimos con Bruce Nauman por su estudio en el año 68, hasta este último pseudo-vandálico de Pipilotti Rist reventando las lunas de los coches aparcados en la calle han sido sesenta y ocho posts a través de los que hemos recorrido juntos medio mundo y casi medio siglo de la mano de mis artistas preferidos. Si bien el listado final es caprichoso e incompleto, yo mismo me sorprendo de como he ido incluyendo a unos y descartando a otros, todos ellos reúnen una característica común: la capacidad de hacernos reflexionar sobre la vida y el mundo en el que vivimos.
 
Me apasiona el arte porque en él no hay grandes certezas y siempre nos plantea más preguntas que respuestas. El arte contemporáneo no es hermético, ni inteligible sino más bien incomodo y subversivo. Nos habla de manera crítica de asuntos cotidianos que todos podemos comprender, eso sí, siempre que estemos dispuestos a desadormecer nuestra mirada. Un ejercicio no pocas veces duro de hacer.
  
Este paseo, mi paseo, acaba aquí. Hay otras rutas y otras muchas miradas por descubrir. Mil gracias a los que me habéis acompañado durante estos meses leyéndome, dejado vuestros comentarios y animándome a completarlo. A los más expertos espero no haberos aburrido y a los inexpertos confío que en solitario seguiréis explorando el vasto terreno que abarca el arte actualmente. Un caminar que no tiene fin.
  

viernes, 23 de septiembre de 2011

Siempre está en todas partes



“Hacer vídeos significa hacer terapia familiar; la televisión es un miembro de la familia que habla.”

La vídeo artista suiza Pipilotti Rist (1962) adquirió este nombre cuando ingresó en la escuela de arte en referencia al personaje de ficción Pipi Calzaslargas al que unió el mote cariñoso Lotti con el que su familia la llamaba desde pequeña. Sus obras que generalmente protagoniza ella misma toman elementos del vídeoclip actualizando su discurso y creando escenas de estética amable y colorista aunque al mismo tiempo llenas de paradojas y sensaciones encontradas.

A través de sus trabajos busca la estimulación de todos los sentidos. Por esto cuida que el público disponga de amplios sillones o pueda tumbarse en el suelo para que ver y escuchar se conviertan en una experiencia. La música también desempeña una función fundamental es sus filmaciones. No es extraño puesto que la artista formó parte del grupo de rock Les Reines Prochaines y desde entonces no dejó de componer. Canciones hipnotizantes, indudablemente bellas y envolventes que crean una atmósfera singular.

En Ever Is Over All (1997) vemos dos proyecciones ligeramente solapadas. Una muestra un plácido campo de exóticas flores rojas. En la otra vemos una joven sonriente con un vestido azul y zapatos color rubí paseando por una calle. La fluidez de ambas escenas se interrumpe cuando comienza a romper los parabrisas de los coches aparcados con una enorme tritoma similar a las que aparecen en el vídeo contiguo. En ese momento una mujer policía se aproxima por su espalda creando cierta tensión. Al alcanzarla ambas se saludan y continúan su camino. La representación de la violencia aquí es hermosa. En esta obra se contraponen las ideas de armonía y vandalismo, naturaleza y tecnología, masculinidad y feminidad, autoridad y complicidad. En un contexto más crítico, reflexiona sobre las dificultades de las mujeres para abrirse camino en el mundo del arte.

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martes, 20 de septiembre de 2011

Memoria de lo que te dí

    
"Las cosas materiales que tenemos y que nos acompañan en nuestra vida son el abecedario personal e intransferible de nuestra memoria."

El neoyorquino Anthony Roveca (1971) estudió psicología y después arte. Desde los comienzos de este siglo, en su trabajo que abarca la escultura, la fotografía y el vídeo, aborda temas relacionados con las formas de construir las redes sociales, la memoria individual o colectiva, la autoconstrucción de la identidad y la fragilidad de los recuerdos. Sus obras sencillas pero evocadoras son una larga meditación sobre la conciencia y el paso del tiempo.

En 'Everything that I have given you. Everything that you have given me.' de 2011, el artista pidió a sus amigos más cercanos que fotografiasen los regalos que conservan de él. Por otro lado, él hizo lo mismo con los regalos que había recibido de cada una de estas personas. Una vez emparejados, en cada díptico se pueden intuir los intereses comunes, el grado de conocimiento mutuo y la intimidad que surge a través de los objetos intercambiados.

De lo que nos habla esta obra, es de la memoria como proceso dinámico. La búsqueda de la huella que ciertas personas o algunas cosas han dejado en nosotros. Los objetos son contenedores de pequeños retazos de memoria, mantienen los ecos de nuestro pasado, de los buenos momentos que hemos podido vivir. A través de ellos mantenemos activos nuestros recuerdos, no solo los que al recibirlos han dejado en nosotros sino también los que después hemos ido depositando en ellos.
   

sábado, 17 de septiembre de 2011

Lamer y enjabonar


"Cuanto más escucho la forma en que mi cuerpo reacciona ante el mundo, más cambia la forma en que vivo mi vida."

Los objetos de Janine Antoni (Bahamas, 1964) son producto de procesos relacionados con el anhelo femenino de la belleza y la limpieza, el deseo de amor y el odio a uno mismo. Siente fascinación por aquellos materiales que pueden ser transformados como resultado de la acción creativa. Su estado emocional es fundamental en todos sus trabajos. Se interesa por los rituales cotidianos del cuerpo, y convierte las actividades más básicas, como comer, bañarse o lavarse, en procesos escultóricos.
 
Los dos bustos que conforman Lick and lather (1993) están hechos con jabón y chocolate, materiales relacionados con el cuerpo y el placer. Creados ambos con un molde de sí misma y al estilo del clasicismo del siglo XIX, constituyen un guiño a la idea de belleza femenina en la historia del arte. Después lamió el chocolate y se enjabono las manos para así cambiar los rasgos de estas dos esculturas. Un gesto poético e íntimo que nos sugiere una perdida, o distorsión, de la identidad.

     

martes, 13 de septiembre de 2011

Gabinetes de medicamentos


“No entiendo por qué la mayoría de las personas creen en la medicina y no creen en el arte, sin cuestionarse ambas.”

El polémico artista británico Damien Hirst (Bristol, 1965) tuvo una juventud conflictiva. Abandonados por su padre, su madre reconoce que perdió el control de su hijo punk. Arrestado varias veces por la policía, logro al segundo intento ingresar en Bellas Artes de la Universidad de Londres. Fue entonces cuando comenzó a trabajar a tiempo parcial en una morgue, experiencia que influyó posteriormente en su elección de temas y materiales. Durante los años 90 saltó a la fama gracias al coleccionista Charles Saatchi con el que acabaría teniendo serios conflictos. Pertenece al denominado YBA (Young British Artists). Actualmente ostenta el récord de ser el artista vivo más cotizado.

La muerte constituye el tema central de su trabajo. Principalmente conocida es su serie 'Natural History' en la que conserva tiburones, ovejas o vacas en herméticas piscinas de formol. En 2007 realizó una obra titulada 'For the Love of God' consistente en una calavera humana del s.XVIII a la que incrustó 8.601 diamantes y que está valorada en 74 millones de euros. Todas las obras de Hirst contienen una sutil e ingeniosa ironía y ponen en cuestión el papel del arte en la cultura contemporánea.

Los botiquines de la serie 'Medicine cabinets' constituyen un universo de naturalezas muertas que expresan y reflejan el cuerpo humano como un campo de vulnerabilidades. Sin embargo albergan la esperanza de subsistir mas allá de la enfermedad gracias a la medicina. En 'Sinner' (1988) el artista incorpora fármacos del botiquín de su propia abuela. Esta obra junto con otras del mismo estilo anticipa los 'Sex Pistols cabinets'  compuestos por 12 grandes armarios de medicamentos dedicados cada uno a una canción del legendario álbum de 1977, 'Never Mind the Bollocks, Here’s the Sex Pistols'. (Nos importa unos cojones, aquí están los Sex Pistols).
   

viernes, 9 de septiembre de 2011

Monitas

Jugando con Laura y Roxanne, Adela la Nadadora y las siamesas
Teressa y Vanessa, y Yoanna y Mireia (1999)
            
"Debido a una alimentación rica en aditivos, conservantes y colorantes, los animales domésticos del siglo XX irán cambiando su estructura genética; esto, unido a unos hábitos de comportamiento muy humanos, así como en la mayoría de los casos haber mantenido relaciones sexuales con sus dueños, da origen a unos nuevos seres híbridos de los cuales las monitas representan un tipo."

Bene Bergado (Salamanca, 1965) recrea a través de sus fotografías, esculturas e instalaciones, un mundo particular en el que desarrolla la idea de hibridación entre ser humano y animal. En sus trabajos de estética futurista próxima a la ciencia-ficción se abordan temáticas como la desproporción, la mirada al futuro y también la reinterpretación del pasado.
 
Las monitas son fruto de mutaciones genéticas y diversos experimentos biotecnológicos. La artista no las considera esculturas y se refiere a ellas como muñecas.  La idea viene de su infancia, cuando las muñecas que había visto por la tele nunca eran en realidad como se las había imaginado. En 1998 creó a Tina y después Adela la deportista, Oliva la escultora, Kiko la diseñadora y Estella la muñeca que más le gusta viajar. Cada una tiene su propia personalidad e historia. Las Monitas siamesas, son una metáfora de una futura inteligencia distribuida. Laura y Roxane (blanca y negra) por un error de programación fueron sometidas a un intercambio cerebral parcial y al despertar de la operación se dieron cuenta de lo mucho que se necesitaban la una a la otra para comprenderse; nunca pensaron en denunciar al hospital.

El interés de la artista por las investigaciones en el campo de la ingeniería genética hay que entenderlo desde el punto de vista de su incidencia en nuestro modo de vida, en nuestra experiencia y relación con lo cotidiano. Las monitas no son lo que cabria esperar de los avances bio-científicos. Son antinaturales según los valores que rigen al mundo actual. No representan un posicionamiento ideológico y moral, sino más bien un juego de hipótesis abiertas o una reflexión acerca de los modos de representar las posibilidades de lo real. Una anormalidad que se nutre de un amplio espacio de libertad.
   

lunes, 5 de septiembre de 2011

Arte aplicable a la sociedad


"Siempre que podamos hacer lo que queramos, me importa bastante poco lo que opine la gente."

El Atelier van Lieshout (AVL), dirigido por Joep van Lieshout, es un colectivo artístico que desde 1995 desarrolla proyectos en el campo de la arquitectura, el diseño y el arte contemporáneo cuya finalidad es la gestión antiautoritaria contra el monopolio del Estado. Se hicieron conocidos en todo el mundo por sus instalaciones de autosuficiencia, la construcción de maquinas para matar animales, caravanas y casas móviles.  En 2001 crearon en el puerto de Rotterdam la AVL Ville, un 'estado libre', que ofrece alojamiento a las personas que trabajan en el estudio. Temas recurrentes en sus obras son la autarquía, la política, así como el sexo, la vida y la muerte.

Mini Capsule Side Entrance 6 Units de 2002 puede ser visto como una granja de gente. Apiladas parecen una conejera. Cada unidad construida en fibra de vidrio tiene un espacio no más grande que una cama de matrimonio y está equipado con elementos básicos: un colchón, sábanas, mantas, una lámpara de noche, ganchos de ropa, una toma de corriente eléctrica y un estante. En 2009 como parte de de un evento en Miami, trascendió los umbrales de la galería y se presentó como escultura pública en un parque. Las implicaciones cambiaron de manera radical. El espacio inerte cobró vida y sus repercusiones socio-culturales comenzaron a tener relevancia: ¿Se trata de un monumento, un lounge VIP o un posible alojamiento temporal de bajo coste para personas de pocos recursos?

   

jueves, 1 de septiembre de 2011

Llanto por un amor ahogado


"Estoy interesada en el efecto emotivo del canto, cómo puede activar la memoria y redefinir un lugar."

Cuando era niña la artista escocesa Susan Philipsz (Glasgow, 1965) cantaba con sus hermanas en el coro de la iglesia. Rechazada en la escuela de Arte, marchó a estudiar a Dundee y Belfast. Originalmente escultora, es sin embargo más conocida por las instalaciones sonoras que crea con su propia voz. A capela graba tanto conocidas canciones populares como versiones de Nirvana o Radiohead que luego reproduce en paradas de autobuses o a través de la megafonía de los supermercados Tesco. Su trabajo se define a partir de la memoria, las referencias y las emociones que los sonidos pueden producir. Su voz amateur, espontánea e intima nos transporta a otro tiempo y a otro lugar.
           
Lowlands (2009) comienza con una obra más pequeña inspirada en Anna Livia Plurabelle, el personaje que aparece en Finnegans Wake de Joyce que es mujer, madre y un río al tiempo. Realizada en Berlín, ciudad en donde la artista reside, para una galería enfrente del canal al que fue lanzada la revolucionaria comunista Rosa Luxemburgo tras recibir un disparo en la cabeza en 1919. De repente estos dos personajes ligados al agua se fueron uniendo en su cabeza.
   
Cuando se le pidió hacer un trabajo en Glasgow, se planteo una versión más grande de esta pieza. Paseando bajo los puentes del rio Clyde encontró sujeto a una barandilla un ramo de flores que marcaba un suicidio. En ese momento supo que este sería el sitio perfecto para instalar su trabajo. Para ello grabo tres versiones de una preciosa balada escocesa del siglo XVI, el lamento Lowlands Away. El resultado es una voz fría y sin cuerpo que se hace eco en las construcciones y se pierde en el tráfico cercano. Apenas se percibe que la obra está allí y de repente el sonido adquiere presencia mientras silba algún tren que en ese momento pasa por encima. Un canto inquietante y melancólico que acompaña al paseante y que en una de sus estrofas nos revela:  "Mi amor se ahoga en las tierras bajas del viento."

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* Susan Philipsz es la ganadora del Turner Prize 2010.

martes, 26 de julio de 2011

El crepusculo y la aurora


"Un artista siempre debería tratar de reflejar sus sentimientos personales en su obra."

El Fotógrafo y videoartista holandés Erwin Olaf (1959) tiene su estudio en una antigua iglesia de Ámsterdam. Su actividad artística se simultanea con trabajos publicitarios para conocidas marcas. Entre sus temáticas más habituales figuran las cuestiones de genero, el erotismo, el consumismo y las relaciones de poder. Su trabajo referencia a menudo la historia de la pintura, la contracultura o el cine, no exento de cierta carga crítica.

Realizado para una exposición en Nueva York, Dusk (2009) fue concebido como un homenaje a la multiculturalidad de esta ciudad e inspirado por un innovador trabajo en torno a 1900 de la fotógrafa Frances B. Jonhson en el que mostraba afro-americanos de clase media en sus hogares, así como escenas de estudiantes de color en una escuela de Virginia. En esta pieza, actores, ropa y mobiliario son completamente negros. Si bien no se entiende completamente el contenido, todo nos sugiere algún tipo de drama personal. Dawn (2009) surge como necesidad de complementar el trabajo anterior. Ambientado en la Rusia del siglo pasado, es reflejo de la otra historia aunque ahora transcurre en una dacha rusa y su protagonista es de aspecto caucásico.


Ambos trabajos están perfectamente sincronizados y juntos conforman un enigmático díptico: el crepúsculo y la aurora. Escenarios inquietantes y tensos en los que se respira una sensación de misterio y ambigüedad. Dos madres que tratan de dormir a sus hijos cantándoles, meciéndoles en la cuna o leyéndoles un libro mientras un niño golpea la pelota contra la pared y el padre cadenciosamente asierra madera.  El efecto incomoda y desconcierta, nos llena de dudas por el tiempo de espera indefinido. Mas allá de lo narrativo, de lo que nos habla es de las emociones humanas. La representación es alegórica de sentimientos y estados de ánimo invisibles, abstractos y contradictorios que transcienden a los hechos y a las personas.
  
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sábado, 23 de julio de 2011

El lugar último es el lugar mismo


"Reivindicar la necesidad del propio lugar como el lugar último, más allá de su representación. Lo real más allá de su imagen"

Carlos Irijalba (Pamplona, 1979) trabaja en proyectos que ahondan en el choque entre lo humano y lo natural. A través de fotografías, videos e instalaciones trata temáticas como la manipulación que el hombre hace del medio ambiente, la experiencia relativa del tiempo y el espacio y la construcción colectiva de lo real.

El proyecto Twilight (2009) se desarrolla en dos fases. La primera se realizó en el campo de El Sardinero en donde tomó varias imágenes nocturnas con los focos del campo de futbol encendidos, pero con una de las torres apagadas. Se generó así un espacio oscuro, inexistente a nuestra vista, que dejaba de ser apto para la creación de un espectáculo. La segunda parte del proyecto consistió en trasladar una de estas torres de 17 metros de altura y 11.000 watios de luz  a una de las últimas selvas de Europa, la de Irati en el norte de Navarra. Este lugar que desaparece en el momento en el que la luz natural deja de existir, revivió durante las noches que fue iluminado. Así, trasladando un elemento propio del entorno urbano al natural, llevando la electricidad al bosque, nos ofrece la posibilidad de experimentar en condiciones extraordinarias el lugar en sí.

Más allá de lo anecdótico, el proyecto analiza el modo en que Occidente construye un circuito de lo real a través de la luz en contraste con Oriente, mucho más consciente de la sombra. El fuego como primer artificio y más tarde la luz artificial han simbolizado el lugar de la transformación. El espectáculo ha heredado estos espacios y sus cualidades. La representación del lugar es por tanto insuficiente y se hace necesario lo real más allá de su imagen.

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sábado, 16 de julio de 2011

Algunas veces el hacer algo no lleva a nada


"Un viaje implica un destino, muchas millas que consumir, mientras que un paseo tiene su propia medida, que se completa en cada punto del camino”.

Francis Alÿs (Amberes,1959) camina mucho. Camina por las calles de Ciudad de México dónde vive desde hace casi veinte años o por cualquier otra ciudad del mundo. Observa con distancia para situarse en un contexto periférico, lejano y melancólico en el tiempo. Lejos de describir con exactitud cada caminata, transforma la misma en un catalizador de historias a caballo entre la realidad y la ficción. Caminar, cargar, mover y transportar son las constantes de su tránsito por el arte y por la vida. Así su trabajo puede ser tan monumental como mover con ayuda de 500 personas una inmensa duna de arena en Lima, tan efímero como remitir una postal o tan irónico como enviar de simbólico emisario a un pavo real a la Bienal de Venecia.

En 'Paradoja de la Praxis 1: Algunas veces el hacer algo no lleva a nada.' (1997) le vemos empujar durante horas por las calles un enorme bloque de hielo. Poco a poco se va derritiendo dejando tras de sí un rastro de agua. El artista interviene directamente en su entorno despertando la curiosidad y la reflexión del espectador acerca de la práctica de entregar bloques de hielo en los comercios y estanquillos de Ciudad de México. En su marcha errante va descubriendo personajes y situaciones que llaman su atención. Al tiempo se interroga sobre dónde y cuando se origina esta costumbre, porque sigue haciéndose, que necesidad cubre y que representa su presencia en la interpretación del espacio urbano. Lo importante es que esta acción da visibilidad a esta entrega que diariamente se realiza de forma anónima y casi invisible.

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jueves, 14 de julio de 2011

Ellos no pueden venir esta noche


“El viaje es la vida, con incidentes y algunas cosas buenas. La obra es más una exploración de lo que uno es y los demás son; es un intento de definirse como individuo y, a partir de ahí, relacionarse con los demás, porque la existencia es una complejidad"

La obra del artista Nacho Criado (Jaén, 1943 – Madrid, 2010) siempre ha estado ligada a la experimentación. Preocupado por la esencia de las cosas entendió su trabajo como una lucha contra sus propias obsesiones. Siempre al margen del mercado prestó más atención al proceso que al producto lo que motivo que muchos de sus proyectos quedasen inacabados a veces por resultar demasiado inmateriales otras por falta de medios para su producción. Pinturas sobre hojalata, maderas apolilladas, termitas devorando revistas de arte, proyectos y recorridos en la naturaleza de Cuenca, piezas sonoras, esculturas de vidrios rotos... Tiempo, memoria, teoría, reducción y conocimiento son sus pinceles. Un artista fundamental que sin embargo no ha tenido todo el reconocimiento que su trabajo merece o lo ha tenido tardíamente.

En 1977 realizó 'Ellos no pueden venir esta noche' en el Palacio de Cristal de Madrid. Fue una instalación con multiples referencias a los artistas que admira: Rothko, Malevich, Mondrian o Klein, Durero, Fidias o Duchamp. Por medio de los homenajes establece una geografía de afinidades, al mismo tiempo que desmonta la idea del yo como algo replegado sobre sí mismo. Inteligentemente resuelto el problema del espacio, cubrió con una alfombra de hojas todo el suelo del recinto para relacionar de este modo interior y exterior. Para enfatizar la idea de anonimato, no figuraba en ningún sitio su nombre sino las fechas de construcción del Palacio y de su nacimiento con unas siglas 'AN'.  El catálogo, que tendría que haber sido un bloque de páginas negras, hace memoria de un buen número de trabajos anteriores al montaje para describir más tarde el grupo de obras que lo componen (la mayor parte del año 77). Cerrando sus páginas una 'confrontación a distancia mínima' del artista con su imagen en un espejo.
  

lunes, 27 de junio de 2011

Volviendo los ojos de adentro hacia fuera


"El trabajo del poeta es reflejar como un espejo las visiones que su sensibilidad le ha conferido, para producir las vistas, las imágenes necesarias para el imaginario colectivo."
  
Nacido en un pequeño pueblo del Piamonte en una familia de campesinos, la infancia de Giuseppe Penone (Garessio, 1947) transcurre entre campos de cultivo e inmensos bosques. En busca de su propia identidad este artista italiano, uno de los mas jóvenes del arte povera, utiliza en sus obras troncos de árboles, piedras o tubérculos. Un intento poético e intimo de encontrar la simbiosis entre cuerpo y naturaleza. En su trabajo se nos propone una reflexión sobre el hombre y el cosmos y su capacidad de creación. Una búsqueda apasionante del azar, la memoria, el paso del tiempo y las representaciones culturales.

En 1970 realiza durante 2 horas en unos encuentros en Roma una acción titulada 'Rovesciare i propri occhi' en la que se puso unas lentillas-espejo que le impedían ver, al tiempo que sus ojos reflejaban el mundo exterior. Cuando Penone abandonó el campo y se instaló en la ciudad dedicó parte de sus trabajos a investigar sobre la relación entre el cuerpo y el entorno. Como la mirada es cuerpo, realiza esta acción. Estas lentillas actúan como una barrera entre él y lo que le rodea. Así se vuelve ciego al privarse de la visión exterior, produciéndose un proceso de introversión, de mirar hacia el interior de si mismo. Mientras, el espectador se ve reflejado en las lentillas y de este modo ve lo que tendría que ser visto. Con este sencillo gesto el cuerpo del artista se convierte en una escultura con capacidad reveladora y esto es lo maravilloso de esta obra.
    

domingo, 19 de junio de 2011

Cine para tocar


"He encontrado una manera de continuar con el cine expandido en mis performances físicas en las que yo soy el elemento central de la acción y el cuerpo se interpreta como un signo, como un código para la expresión artística y social."

La artista austriaca Valie Export (Linz, 1940) es pionera en analizar las políticas de género. Educada en un convento hasta los 14 años estudió pintura, dibujo y diseño en Viena y trabajó brevemente en la industria del cine como guionista y directora. Su trabajo artístico incluye video-instalaciones, performances, cine expandido, animaciones por ordenador, fotografía, escultura y publicaciones sobre arte contemporáneo.

A finales de los años 60 adquiere una nueva identidad al cambiar su nombre Waltraud  por Valie y desprenderse de los apellidos del padre y del esposo para apropiarse de una popular marca de cigarrillos de bajo precio, Smart Export. Emancipada de toda sumisión masculina se reafirma en la escena artística centroeuropea dominada en ese momento por el accionismo vienes.

"Tap and Touch Cinema" se llevó a cabo en diez ciudades europeas entre 1968-1971. En este revolucionario trabajo, la artista lleva ceñido a su torso desnudo un pequeño cine con una cortinilla de modo que sus pechos no pueden ser vistos pero si tocados. Con un altavoz los transeúntes son invitados a acercarse a introducir sus manos durante 30 segundos. La experiencia táctil es lo opuesto al voyeurismo. Esta obra tiene sus raíces en el cine de feria, cuestiona el papel pasivo de la mujer en las películas y reinterpreta la función del público. De forma provocadora confronta la naturaleza privada de la sexualidad con los lugares públicos de sus actuaciones y transgrede la censura pasando por alto normas morales y sociales preestablecidas.

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sábado, 11 de junio de 2011

Pieza de disparo


“La tensión mental que asumo para controlar mis performances es el eje de la acción, no la violencia que la acompaña.”

El artista Chris Burden (Boston, 1946), se hizo muy conocido a principio de los años 70 a través de sus performances profundamente trasgresoras en las que la idea del peligro personal como expresión artística fue central. Después de 1975 tras ejecutar casi setenta performances diferentes comenzó un período en el que creó instalaciones y esculturas que cuestionan la ciencia y la política.

En todo su trabajo existe una preocupación por las formas de poder. En un intento de descomercializar la producción artística, sus acciones cuidadosamente construidas son una mezcla de concepto, desarrollo y el resultado. El uso de la violencia en su obra además de reflejar a nuestra sociedad es un mecanismo físico que utiliza el artista para controlar el destino, generalmente incontrolable.

En Shoot (1971) pidió a un amigo que le disparara en el brazo izquierdo desde una distancia de 5m. Preocupado por la intromisión de los medios de comunicación la acción se desarrollo en un ambiente privado. El publico conformado únicamente por algunos amigos artistas juega un papel relevante. La proximidad incitaba a evitar el suceso sin embargo los observadores como conocedores del arte que además comprendían sus intenciones, tuvieron que suprimir sus instintos y participar en la violencia. Elegante y precisa, esta obra de la que apenas quedaron unas cuantas fotografías, aunque minuciosamente planeada no estaba exenta de peligro. A pesar de su sencillez y brevedad, toca la misma esencia de la vida y casi cuarenta años después sigue siendo controvertida. Mientras las pistolas existan será recordada.
  

sábado, 4 de junio de 2011

Asomad la cabeza


"El arte es mi forma de conocimiento del mundo" Lygia Pape

La artista brasileña Lygia Pape (1927-2004) participó en dos importantes movimientos: el concretismo y el neoconcretismo; aunque después se trasladó más allá de ellos. Sus trabajos abarcan multitud de formatos: pintura, grabado, escultura, danza, cine, performance e instalación. A través de sus obras exploró los límites formales y conceptuales del arte, tratando siempre de ampliar la dimensión social del mismo.

En 1968 creó una de sus piezas más conocidas: 'Divisor'. Esta experiencia profundamente poética consiste en una gran tela con pequeñas aberturas a través de las cuales decenas de participantes asoman sus cabezas, mientras sus cuerpos quedan envueltos por el tejido. La enorme superficie blanca separa al tiempo que une, convierte la individualidad en una comunidad que se mueve y avanza unida. En este trabajo tan lúdico como conceptual la artista equipara observador y participante, invitando a los asistentes a completar la obra integrándose a ella. El movimiento colectivo multitudinario se apropia del espacio público y plantea la transformación creativa de la vida urbana al mismo tiempo. Esta obra se puede  interpretar como una crítica a la burocracia moderna, así como una reflexión sobre la división entre mente y cuerpo.

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jueves, 26 de mayo de 2011

El ritual de la vida


“Mi arte se basa en la creencia de una energía universal que corre a través de todas las cosas. Mis obras son las venas de la irrigación de ese fluido universal. A través de ellas asciende la savia ancestral, las creencias originales, la acumulación primordial, los pensamientos inconscientes que animan el mundo."

Ana Mendieta (La Havana, 1948) fue enviada  por sus padres junto a su hermana a Estados Unidos cuando solo tenía 14 años en la llamada operación Peter Pan. En Iowa vivió desde entonces en centros de acogida. Las hermanas padecieron incomodas situaciones xenófobas. El desarraigo, la sensación de perdida y la obligación de adaptarse a la nueva cultura la traumaron para siempre. En este contexto afirma que solo le quedaron dos opciones: "ser criminal o artista".

Profundamente autobiográficos, en sus trabajos se abordan temas como el feminismo, la violencia, la marginalidad, el lugar de pertenencia, la vida y la muerte. Como exiliada desarrolló una identidad fragmentada y fronteriza. Fue en México que encontró un lugar de sosiego donde realizar su obra y calmar la imposibilidad de volver a su patria. 

En la serie Siluetas (1973-1980) crea contornos femeninos en lugares naturales. El barro, la arena o el pasto se convierten en lienzos donde dejar impreso su cuerpo junto a restos de ramas, hojas, sangre o fuego. A medio camino entre el land art y la performance, en estos poéticos trabajos relacionados con rituales y religiones primitivas subyace un profundo deseo de regreso al seno materno, de incorporarse espiritual y físicamente a la naturaleza y fundirse en ella en un acto místico. Una simbiosis entre mujer y paisaje, una metáfora del retorno al origen.

Ana Mendieta murió trágicamente a los 36 años cuando cayó al vacío desde el trigésimo cuarto piso de su apartamento en el Soho de Nueva York tras una violenta discusión con su marido el escultor Carl André. Las circunstancias que rodearon su muerte nunca fueron esclarecidas.
  

viernes, 20 de mayo de 2011

Mis manos son mi corazón


"My hands are my heart  no es algo tan artesanal o tan primitivo. Es mucho más que un simple gesto. La inteligencia en un gesto simple que lo hace funcionar como algo más sofisticado".

El artista mexicano Gabriel Orozco (Jalapa, 1962) vive a caballo entre Nueva York y París. No tiene estudio porque no le interesa trabajar en un ambiente totalmente preestablecido. Siempre creativo, lúdico e innovador, a través de su obra investiga nuevas formas de mostrar lo cotidiano, la belleza de lo fugaz y las posibilidades de la materia. Entre sus creaciones se encuentran innumerables objetos encontrados y modificados, residuos urbanos, materiales efímeros y otros testimonios de la industria y el consumo. Una combinación original de lógica conceptual y práctica política.

En el autorretato My hands are my heart (1991) aparece con el torso desnudo, las manos al pecho cerradas y luego abiertas en torno a un corazón de arcilla, con sus dedos impresos sobre el tierno material rojizo. La huella bien visible conserva el momento de la creación improvisada, lo que él ha descrito como "un gesto de espontaneidad". El uso de barro ordinario de una fábrica de ladrillos avala su predilección por los materiales humildes y cotidianos. En esta acción tan íntima como poética, está visible la influencia de su maestro el artista inglés Anthony Gormley con el que años atrás coció multitud de piezas en los hornos artesanales de Choula.
    

domingo, 15 de mayo de 2011

Comisario de profesión

Natural State, Zero1, Olot (2005) Comisario: Martí Manen

"Existe una nueva generación de comisarios de exposiciones que trata de activar el escenario, un tanto plomizo, del arte contemporáneo.” Martí Manen

Si en los años 80 el protagonista del panorama artístico fue el artista y en los 90 los museos y centros de arte, en este momento vivimos la era de las exposiciones.  La exposición actualmente ya no se plantea en términos de formas sino de formatos de representación. Concebida como laboratorio de ideas y lugar de co-producción, es sin duda una forma vivaz de expresión cultural e intelectual. En este escenario, se impone la figura del comisario.

Un comisario (o curator) es, como el artista, productor y difusor de información. La relación entre comisario y artista ha cambiado la manera de concebir actualmente una exposición, nos ha llevado a replantear el concepto de autoría y a considerar la creación como una acción colectiva.

El incremento de estudiantes de comisariado de arte y el acceso de estos a una información global gracias a las nuevas tecnologías han dado lugar a una joven generación de profesionales sin complejos a la hora de crear nuevos conceptos expositivos, que asume con naturalidad  la crítica del arte, experimenta con los espacios y propone otros modos de observar las obras. El papel de las redes sociales virtuales ha sido clave en esta transformación; favoreciendo la circulación de ideas, han generado una capacidad de respuesta a los cambios sociales actuales pero también son responsables de una mayor uniformidad y falta de autenticidad.

El comisario de exposiciones mayoritariamente freelance trabaja contratado por el museo o en proyectos externos. De este modo suman esfuerzos con las instituciones artísticas si bien manteniendo una cierta independencia, lo que les da libertad en la elección de sus discursos, además de una visión crítica e independiente. Sería un error que los comisarios acaben convertidos en simples gestores. Su función y supervivencia pasan por explorar nuevas vías de trabajo que incrementen el dialogo con el público y generen en él un constante debate social.
  

sábado, 7 de mayo de 2011

¡Sal de mi cuarto!


"Hay recuerdos que permanecen vivos, a pesar de que la experiencia misma hace tiempo que pasó. Siempre existe la posibilidad de haberlos inventado  uno mismo, y nunca estaremos seguros ya que no se pueden verificar."

El artista georgiano Andro Wekua (Sochumi, 1977) abandonó su país a los 15 años a causa de la guerra civil. Actualmente reside en Zurich. Sus instalaciones, collages y películas se encuentran a medio camino entre el Este y el Oeste. Profundamente narrativas, sus composiciones son una combinación inquietante de pasado y ficción. En ellas se abordan cuestiones relacionadas con el modo en que llenamos los vacíos de nuestra memoria, la mezcla de recuerdos subjetivos y documentos históricos o el papel de la fantasía en estos procesos.

En la instalación Get Out of my Room (2006) vemos la figura de un jóven en una habitación cerrada sentado con los pies sobre una gran mesa en la que hay un mapa imaginario. Sobre las paredes como si de una celda se tratase cuelgan sus propios cuadros. El ambiente es sombrío y misterioso, cercano al cine de terror. Aunque destinado a ser expuesto y mirado por el público la figura al no tener ojos se resiste a ello. Este trabajo aborda dos contrarios: lo mítico y la reclusión claustrofóbica.

Aislamiento e introspección nos producen la ilusión de protegernos del mundo. La riqueza de los pensamientos íntimos nos hace autosuficientes, sin embargo nos genera cierta inquietud el hecho de que la armonía con uno mismo nos condene a la soledad. Pero la introspección es algo más que amor propio, es también la evocación de la memoria que puede a veces sanar o bien convertirse en obsesión y melancolía.
   

jueves, 28 de abril de 2011

Pipas de girasol

 

“El mayor éxito de las sociedades totalitarias es hacer pensar a la gente que no es nada, que haga lo que haga nada va a cambiar"

Hijo de un poeta represaliado durante la Revolución Cultural, Ai Weiwei (Pekín, 1957) nos sorprendió en la última documenta de 2007 cuando se trajo a Kassel a 1001 compatriotas para que conviviesen durante la muestra con habitantes y turistas en lo que llamó Fairytale (cuento de hadas). Este artista trastoca el uso de los objetos y sus significados y trata de desmontar el orden establecido cuestionando las tradiciones. Así en 1995 se fotografiaba dejando caer un jarrón de la dinastía Han. Su labor de activista y denuncia al régimen le han enfrentado a las autoridades de su país, que en represalia en diciembre demolieron su estudio de Shanghái  y en enero se canceló su primera gran exposición en China.

Sunflower (2010) es una escultura enorme que esta formada por millones de pequeñas pipas de girasol. Aunque parezcan idénticas, cada pieza ha sido hecha a mano en porcelana. Lejos de ser producidas industrialmente, son resultado del esfuerzo de los artesanos de la ciudad de Jingdezhen. Esta obra nos obliga a reflexionar sobre el significado actual del "made in China". Hermosa y conmovedora, el concepto va más allá de la experiencia de caminar sobre las pipas. Aquí se nos plantean aspectos relacionados con la insignificancia del ser humano, su papel en la sociedad y la necesidad de actuar todos juntos para cambiar el mundo, preservar el medio ambiente y gestar el futuro.

Sin noticias de Ai Weiwei detenido e incomunicado desde el 3 de abril, sus 100 millones de pipas se exhiben silenciosas hasta el 2 de mayo de 2011 en la sala de turbinas de la Tate Gallery de Londres. Importantes instituciones del mundo del arte auspician la recogida internacional de firmas para reclamar su liberación.

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martes, 26 de abril de 2011

El imperio de la fatiga

Cosima von Bonin: Vomiting Chick, 2010

La artista alemana-keniata Cosima von Bonin (Mombasa,1962)  es tan inclasificable como sorprendente. En su obra se plantean aspectos relacionados con el espacio social, la naturaleza de lo lúdico o la identidad individual. Esceni- fica historias colectivas o personales e indaga en los elementos culturales que las determinan como la televisión, la música techno o el hip-hop. De este modo explora estas distintas formas de expresión cultural. A menudo colabora con otros artistas, músicos y teóricos, cuestionando la función del autor.

Característicos de su trabajo son los enormes peluches de lana que representan criaturas de colores, animales u hongos. Estas creaciones textiles que nos remiten a la infancia están relacionadas con lo lúdico. En ellas conviven las ideas de juego y aprendizaje. Sin embargo nos miran con escepticismo. Sus posturas y actitudes poco tienen de infantiles y en su esencia nos hablan de la búsqueda de libertad.

En la exposición The Fatigue Empire (2010) en el Kunsthaus Bregenz de Austria podían verse grandes construcciones en madera, coches de cartón tapizados con telas de colores, una escultura homenaje a Martin Kippenberger, así como multitud de sus peluches. Además de la música de Moritz von Oswald, se mostraban también películas de Thomas Bernhard. La artista consigue crear un mundo complejo que recupera lo artesanal y referencia lo cotidiano. Bajo una mirada siempre femenina, humor y crítica se asocian con el fin de incitarnos a la auto-reflexión.
  

jueves, 14 de abril de 2011

La profundidad de las apariencias


"Por lo general la imagen que nosotros damos no expresa que estamos en proceso, que no puede haber una definición estricta de nosotros."

La bilbaína Ana Laura Aláez (1964) se inspira en la música, la moda, la cosmética y los clubes nocturnos. A través de todo este universo generalmente considerado como superficial y efímero reflexiona sobre la noción de belleza, la relación deseo-realidad  y el proceso de construcción de la identidad. En sus instalaciones se entremezclan vídeos, música y objetos con el propósito de implicar al público en su trabajo y ampliar las fronteras del arte hacia dominios periféricos en los que se dan cita la vida y el arte.

En el vídeo Make up sequences (2001) vemos a la artista girar infinitamente como si estuviese siendo modelada en un torno. Emulando el proceso creativo aquí el maquillaje es equivalente a la pintura. Los accesorios muchos de ellos rescatados de obras anteriores se convierten en extensiones de su personalidad. De este modo en cada giro cambia de look una y otra vez. Los sonidos de Girls on Film, su proyecto musical en el que ella pone la voz, crean una atmósfera absorbente. Esta pieza nos habla de las apariencias y es una bella metáfora acerca de las múltiples personalidades que habitan en nosotros.


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sábado, 9 de abril de 2011

Lujo obsceno


"Yo no juzgo con mi cámara, no busco lo que está bien y lo que está mal, eso es algo que dejo al espectador"

El fotógrafo británico Martin Parr (1952) comenzó a retratar a principios de los 80 la forma de vida en la era Thatcher prestando especial atención al deterioro social y a los problemas de la clase trabajadora. Después ha abordado otros temas como el consumismo, el turismo de masas o la globalización, siempre con un gran sentido del humor y la ironía. Es miembro de la Agencia Magnum desde 1994.

Para dar forma a la serie Luxury (2004-08) ha recorrido durante cuatro años los lugares más opulentos del planeta: presentaciones de joyas en Dubai, desfiles de moda en Moscú, una prestigiosa carrera de caballos en Australia o el salón del automóvil de Pekín. Su mirada nos muestra los aspectos más banales del lujo. Parr tiene la habilidad de colocar la cosa equivocada junto a la cosa correcta, lo grande junto a lo pequeño, lo suave junto a lo áspero. Describe la vida humana tal como es, más que como quisiéramos que fuera. Al mirar estas fotos despierta en nosotros el deseo de saber acerca de los personajes retratados.

Señalar que el significado de esta serie actualmente cambió. La crisis económica ha barrido este escaparate de lujo obsceno, por supuesto no a los ricos, ni el dinero pero sí esta exhibición de exceso. Es triste que nuestra sociedad nos avoque a desear este estilo de vida extravagante. Al final es un asunto de falsedad: falso lujo, falso dinero y falsa felicidad.

Y cabría preguntarse, ¿Qué es lujo para ti?
   

martes, 5 de abril de 2011

Paseando con alguien que no está aquí


"¡Imagínate que vas a dar un paseo con alguien que no está aquí! El juego comienza en el momento en el que tu móvil comienza a sonar. Caminas por la ciudad, la función sucede en el teléfono."

El colectivo teatral germano-suizo Rimini Protokoll realiza desde los años 90 sus propuestas experimentales en las que se confunden veracidad y ficción. El punto de partida de sus proyectos es la vida real. A partir de una situación concreta y un lugar determinado se crea un contexto en el que el espectador se convierte en actor.

CALL CUTTA Mobile Phone Theatre (2005) emplea como escenario un centro de llamadas ubicado en Calcuta en el que grandes empresas globales tienen deslocalizados sus servicios de atención al cliente. En esta performance sonora no hay actores reales. A través de conversaciones semi-preparadas los teleoperadores desde India interactúan y guían a transeúntes por las calles de Berlín durante una hora. Entre ambas personas poco a poco surge cierta confianza mutua y una se deja conducir a través de la otra convertida en un GPS humano ubicado a miles de kilómetros. En cierto momento el caminante es guiado hasta un edificio abandonado y el agente indio le explica que la casa perteneció a su familia  y que la mujer que vive en la acera es su abuela. Este queda desconcertado al ver que la anciana esta tan solo a unos metros de él. Al final del paseo llega al escaparate de una tienda de electrónica de un centro comercial en Potsdamer Platz donde a través de una pantalla de televisión ambos establecen contacto visual.

La tecnología móvil locativa en el mundo globalizado de hoy puede aproximarnos a lo que tenemos cerca, pero también a lo distante. Esta obra estimula  una mayor consciencia hacia las personas anónimas que realizan este tipo de trabajos desde la otra punta del planeta. Difuminando lo real y lo imaginario conecta participantes urbanos y actores teleoperadores, si bien no debemos olvidar que mientras para unos no deja de ser una actividad lúdica para los otros es el trabajo que les da de comer. De lo que se trata es de ampliar nuestra noción de percepción para ahondar en un mejor conocimiento del mundo y en definitiva de nosotros mismos.
     

jueves, 31 de marzo de 2011

Arte para superar la tristeza


"La idea me vino a la cabeza cuando me pregunté: ¿Para qué diablos continuar haciendo arte? La pregunta era pertinente tras el 11 de septiembre.”

El principal sujeto de las fotografías de Cindy Sherman (Nueva Jersey, 1954) es ella misma. Convertida en actriz de su propio trabajo en sus autorretratos se maquilla y transforma infinitamente hasta que el referente real se diluye en el personaje. Estas puestas en escena debido a su estética y su potente sentido narrativo remitían en un inicio al cine de los años 50, aunque posteriormente sus temáticas se han ido ampliando.

La serie de payasos (2004) surge como respuesta al desanimo de la artista tras los atentados del 11S. Los amigos le animaron a hacer arte para superar esta tristeza. Estos seres grotescos le proporcionaron un vocabulario sin límites en el que coexisten diversos estratos de emociones. Los payasos representan no solamente la ironía o el humor, sino también lo patético y lo trágico. Sus bocas exageradamente sonrientes y sus ojos enormes son la caricatura perfecta de las imperfecciones humanas.

Los payasos pululan a nuestro alrededor para recordarnos que tras el maquillaje destinado a hacernos reír existe otro rostro, aunque nos resistamos a reconocerlo. ¿Qué se esconde realmente detrás de esas coloridas máscaras? Quizás nada más que una inmensa tristeza, o tal vez un inesperado gesto de terror.
   

viernes, 25 de marzo de 2011

Ojalá yo pudiera llorar

  
El archivo The Atlas Group (1989-2004) se reparte entre Beirut y Nueva York y reúne un inmenso conjunto de documentos visuales, sonoros y escritos relacionados con la historia reciente del Líbano. La iniciativa surge del artista Walid Raad, cuando intentando entender y testimoniar la situación de conflicto que vive su país se dio cuenta de que otras personas también habían seguido este mismo impulso. El archivo es el resultado artístico del uso de dichos registros encontrados y de otros producidos por el artista y una rotación de colaboradores.

Unos rayados y deteriorados negativos, sirvieron Walid Raad para realizar We decided to let them say, 'we are convinced', twice. Estas fotografías tomadas por él cuando apenas tenia 15 años durante los ataques israelíes a Beirut en 1982, fueron rescatadas del olvido y ampliadas enormemente. El resultado son imágenes con calidades casi pictóricas.

El Operador 17 era uno de los oficiales de Inteligencia del Ejército libanés encargado de vigilar con su cámara una playa localizada al este de Beirut. Sin embargo decidió filmar el atardecer sin identificar a ninguna persona. Una y otra vez repitió esto de forma rutinaria convirtiéndolo en un placer estético al margen de toda utilidad bélica. Aunque fue expulsado del Ejército, se le permitió conservar sus filmaciones.

En la obra Let’s be honest, the weather helped, Walid Radd señala con colores llamativos sobre fotografías en blanco y negro los lugares donde ha encontrado balas y restos de metralla. Los distintos colores se corresponden con el color de las puntas de los proyectiles.

A través de fotos recortadas, en Already been in a lake of fire-Notebook volume 38, se deja constancia de los tipos de automóviles usados como coches bomba, integrando notas minuciosas sobre lugar, hora y fecha de las explosiones, color y marca del vehículo y número de víctimas.

En Missing Lebanese wars-Notebook volume 72 se extraen de periódicos las fotos de carreras de caballos que congelan el momento de la llegada a meta. Curiosamente nunca captan el momento exacto. Importantes historiadores del Líbano fueron muy aficionados a hacer apuestas sobre la precisión de estas fotos. Esta incapacidad para capturar el presente, nos plantea numerosas preguntas acerca de cómo se escribe la historia.

The Atlas Group es un enfoque peculiar y original que nos obliga a desviar la mirada y presenciar lo cotidiano. Y es que siempre al margen de soldados y gobiernos enfrentados, los ciudadanos habituados a convivir con los conflictos armados no renuncian a protagonizar su día a día.
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fotografías:
  arriba superior: "I Only Wish That I Could Weep" Walid Raad (2002)
  arriba inferior de izq a dcha: "We decided to let them say, 'we are convinced', twice" (2002); "Operator #17" (1996-2003); "Let’s be honest, the weather helped" (1998);  "Missing Lebanese wars-Notebook volume 72" Dr. Fadl Fakhouri (1989) 
  abajo: "Already been in a lake of fire-Notebook volume 38" (2003).